HUBO UN CUARTO RESERVADO EN SINGAPUR.
Lo pagó la escuadra McLaren, pero nunca se utilizó. Estuvo a nombre a Alex Palou, el nuevo bicampeón de la IndyCar, que sugirió que la pasaría mejor en Los Ángeles que en el húmedo clima del sur asiático.
No solo un cuarto de hotel: también una butaca. Un coche de Fórmula 1 esperó en el trazado de Marina Bay, listo para ser puesto en marcha en la Práctica Libre 1 del Grand Prix de Singapur. No había necesidad de hacer una butaca a medida: el equipo dispone de la que el español utilizó en la FP1 en el Grand Prix de los Estados Unidos de 2022.
Pero… ¿cómo haría alguien para manejar el auto de un ejecutivo que lo demandó por 20 millones de dólares?
De vuelta al principio.
Palou fue campeón de la IndyCar por segunda vez en tres años. Ganó puchitos: Chip Ganassi le pagó 200 mil dólares por la campaña 2021 y por la que acabó en Laguna Seca le abonó una cifra apenas inferior al millón de dólares.
Semejante amarretismo había impulsado al piloto español a coquetear el año pasado con McLaren. No solo por una cuota superior de dinero en trueque por los servicios prestados sino por la posibilidad de poder arribar a la Fórmula 1, un sueño que a los pilotos españoles de las últimas dos décadas les abonó Fernando Alonso.
Los rumores vinculando a Palou con la F-1 resultaron múltiples a lo largo de 2023. Su amistad con Max Verstappen lo daban como con chances de subirse a un Alpha Tauri (o como sea que esa escuadra vaya a denominarse en 2024).
Se habló inclusive de que Zak Brown, el CEO de McLaren, podía cederlo a préstamo a Williams, para que Palou acompañara al ascendente Alex Albon en la campaña venidera. Albon es clase 1996; Palou, 1997.
Y estuvo todo en marcha: Palou tenía que llevar adelante la Práctica Libre número 1 del Grand Prix de Singapur, que se iba a disputar.
Pero todo estalló por los aires. Palou decidió no honrar el contrato que había firmado con McLaren para 2024 y se deshizo del grupo de management que lo asesoraba, el MMI, para volver a trabajar con el manager Roger Yasukawa. Ganassi anunció la firma de un contrato plurianual con su campeón, sin dar a conocer las cifras, aunque se cree que esta vez multiplicará por cuatro o cinco lo que el español ganó este año.
La pregunta clave es: ¿por qué Palou desdeñó a la Fórmula 1? ¿Por qué hizo promovió tantos desastres a nivel contractual?
El español dio a entender que los puentes que le habían tendido en McLaren para llegar a la máxima categoría eran extenuantes o, directamente, se habían caído. Toda la negociación entre MMI y Brown se hizo durante los meses finales de 2022, cuando Oscar Piastri todavía no había debutado en Fórmula 1.
Llevado de la mano por su compatriota Mark Webber, el australiano deslumbró a Brown y preocupó a MMI. De golpe, el portal parecía cerrarse. ¿Cuánto más tendría que esperar para desembarcar en la F-1?, se preguntó Palou. Ya tiene 26: ¿llegar con 28 es lo adecuado? ¿Dejar pasar lo que cree que son sus mejores años?
MMI creía que valía la pena esperar; el español no lo vio igual. Ganassi conservaba vacantes: no le interesaba retener al Indy 500 winner Marcus Ericsson, aunque no tuviera que pagarle un dólar. Nunca le pagó, en realidad: el sueco siempre corrió pagado por su sponsor.
Y si no podía ir a Fórmula 1, tenía que quedarse en IndyCar. Entonces, en esa alternativa, ¿no era preferible permanecer con Ganassi, que al cabo del año ganó nueve de las 17 carreras de la temporada, que con McLaren, el único equipo de los grandes que no ganó una sola carrera en el 2023?
A comienzos de julio, cuando Palou emergía de la Mid-Ohio 200 con una racha fabulosa de cuatro triunfos en las últimas cinco carreras, sentía agridulce su panorama: quedaba a un paso de conquistar el título pero las performances de Piastri en Fórmula 1 le estaban cerrando la puerta. Los planes originales ya no parecían serle útiles o cómodos.
Los contratos, en definitiva, son pedazos de papel manchados con tinta.
Cuando vio que el que había firmado con Palou no iba a ser honrado por el español, pese a que ya le había adelantado dinero, Brown incendió en público al piloto con un comunicado fortísimo. Ganassi se contrarió al saber que Palou había firmado algo con otro equipo cuando, según el vínculo vigente, no podía hablar con otros equipos antes del 1º de agosto pasado.
Palou no había incumplido un convenio, sino dos. Sin embargo, Ganassi lo defendió frente al ataque de Brown: «Palou forma parte de nuestro equipo y tiene contrato desde la temporada 2021. Es la interferencia de ese contrato por parte de McLaren lo que inició este proceso e irónicamente, ahora se hacen las víctimas«, dijo con crudeza.«Crecí respetando al equipo McLaren y su éxito. La nueva dirección no recibe mi mismo respeto».
La guerra es sin cuartel.
“Palou sigue siendo nuestro piloto reserva. Pero no creo que vaya a presentarse en Singapur, a lo que está obligado”, dijo Brown en el fin de semana. “Se suponía que estaría con nosotros en todas las carreras después de la Indycar, como piloto reserva”.
Como Palou había ganado la carrera de Laguna Seca en 2022, McLaren había planeado tiempo atrás presentarlo como su gran adquisición en esa misma pista, este pasado fin de semana. Palou le escupió esos planes un mes y medio atrás.
Ganassi también hizo lo suyo. Cuando salió a defender a Palou ya hacía rato que estaba trabajando para retenerlo. En Laguna Seca contó que, un año atrás, cuando dejaba el circuito, tuvo la sospecha que Palou no dejaría su equipo pese a todo. “pensé, ‘no creo que este tipo se haya ido ya’. Y trabajamos”.
McLaren tenía la idea de llevar a Palou a todas las carreras remanentes de Fórmula 1 de 2023. Ahí se le abre un hueco interesante a Pato O’Ward, si el mexicano sabe cómo aprovecharlo. Y está en Japón…
Brown, que tiene una vacante en IndyCar ante la salida de Felix Rosenqvist –prevista hace rato para darle un lugar a Palou-, decidió demandar a Palou por rotura de contrato y daños adicionales ante los tribunales comerciales del Reino Unido, con la esperanza de recuperar el dinero que ya le había transferido a Palou en 2022 como anticipo de su salario 2024. La demanda es por 20 millones de dólares.
Dos datos son seguros:
- Palou correrá en 2024 para Ganassi
- Será difícil que Palou pueda correr en otro equipo, a partir de 2025, que no sea Ganassi. Sus idas y vueltas de los dos últimos años no impresionaron a nadie, sino por el contrario.
Por supuesto, esta historia continúa.
La F1 le da la espalda a él. Un bodrio vignone, ni te leo