UNA ALTERNATIVA, FIAT LINEA COMPETIZIONE

Concesionarios, empresarios (muy poderosos algunos), comerciantes, entusiastas, pilotos aficionados, Bruno Marioni el ex futbolista cuñado de los Pernía integrado este año y hasta el mismísimo presidente de Fiat Auto Argentina, Cristiano Rattazzi, no le mezquinan acelerador a los autos de la Fiat Linea Competizione. Como sabés, acompañan cada capítulo del TC 2000 desde el año pasado.

Cuando dan los primeros pasos arriba de los autos, luego del indispensable «día de entrenamiento» que debe cumplirse indefectiblemente, los que se manejan los coches se conforman con «sentirse corredores por un día», pero cuando le toman el gustito, empiezan a sacarle punta a los calculos, a los tiempos de vuelta y a las estrategias para encarar una carrera, terminan enganchados y se los comienza a ver en forma habitual arriba de los Linea. Después vienen los espectáculos, mas de una vez con piruetas y piñas.

La Fiat Linea Competizione (FLC) apunta ser la herramienta para tantos apasionados de los autos y la velocidad, que por tantas razones, no han alcanzado la condición de pilotos profesionales. ¡Que importa dicen!, basta con el que el motor estándar, 1893cc con 130 CV, pero con algunos toques sutiles; suspensiones para competición, mas la incorporación de todas las medidas de seguridad exigidas, para que fluya el corredor que tantos llevan adentro. Adecuados con las medidas de seguridad exigidas, jaula antivelco, butaca, cinturones de seguridad, indicadores del funcionamiento del motor, cubiertas mas anchas y slicks y desde ya, escape libre que deja escapar ese ruidito distinto, los autos están listos para ir a las pistas.

Desde el punto de vista comercial, la categoría cuenta con patrocinantes oficiales que están reflejados en los coches, y luego cada competidor le agrega los de su propia cosecha, que les permite hacer frente al costo del alquiler. ¿A que velocidad viajan los autos de la FLC?, no andan lejos de los 200 km/h.

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Fotos AIF
1-5-2010