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¿UN SEGUNDO MÁS QUÉ?

Dos días después que naciera su hija Lily, Max Verstappen dominó la clasificación del Grand Prix de Miami, dejando atrás a los poderosos McLaren, y en ridículo a quienes realmente creían en el mito de que, por cada hijo, un piloto pierde un segundo por vuelta. Aquel mito se le atribuye a Don Enzo Ferrari, que en realidad quería compromiso de parte de sus pilotos, pero el campeón mundial lo hizo trizas con su vuelta de fantasía.

 

«La verdad es que no escucho estas tonterías», señaló Max después de quedarse con su tercera pole en seis carreras con su problemático RB21. «Solo hago lo mío. Creo que ya hay suficientes pilotos de carreras que han sido campeones del mundo incluso teniendo hijos, ¿saben? Así que ni siquiera sé de dónde viene eso».

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El mito es uno de los más antiguos del automovilismo, y nació en una época en la que, siendo más grandes los pilotos -muchos con más de 40 años- era habitual que tuvieran hijos al llegar a la Fórmula 1. En la actualidad, solo Max y Nico Hulkenberg son padres entre los 20 pilotos de la categoría.

«Ha sido bueno poder pasar unos días en casa antes de venir», señaló el poleman al explicar porqué se perdió el jueves, habitual día de prensa, para asistir al nacimiento de su hija. «Cuando acaba de nacer, quieres asegurarte de que todo esté bien. Claramente, ser padre no me ha hecho más lento. Así que eso es lo positivo. Podemos descartarlo también por la gente que lo menciona. Y sí, cuando estuve aquí, la verdad es que sí, lo hablo con bastante fluidez. En fin, estoy en contacto constante con mi novia durante todo el día. Así que, ya sabes, sacando fotos y hablando un poco por FaceTime. Siempre está ahí. Pero ahora hay un miembro más en la familia».

Max se lo tomó con naturalidad y sorprendió que, en una pista en la que McLaren era absoluto favorito, los postergara de manera decisiva en ambas salidas de la Q3: 

«Creo que también mejoramos un poco el coche, lo que me ayudó a rotarlo un poco mejor y, sinceramente, en la Q1, la Q2 y la Q3 mejoramos en cada vuelta, intentando encontrar el límite. Tuve un pequeño contratiempo en mi última vuelta, en la curva 1, así que perdí algo de tiempo. Aquí es muy complicado con los neumáticos a lo largo de una vuelta, pero al final salió bien, así que estoy muy contento de estar en la pole».

Los McLaren ya habían sido derrotados por el sorprendente Kimi Antonelli en la clasificación del Sprint, y Max se tomó revancha de la penalización que sufrió un rato antes en el Sprint, producto de una mala decisión de su equipo. Por el otro lado, el neerlandés pudo aprovechar la innovación que RedBull trajo a Miami:

«Todavía estamos lidiando con nuestras limitaciones en el coche, pero creo que hemos estado bastante bien a nivel de vuelta. Si nos fijamos en las curvas, vamos un poco lentos en la recta esta semana. Y creo que, sobre todo, McLaren y Mercedes, fue porque estrenaron un motor nuevo, y claro, eso siempre da un poco más de potencia que uno usado. Pero sí, parece que es un poco mejor. Claro que en tandas largas la cosa cambia. Los neumáticos se calientan mucho por aquí. No sé si lloverá o no, ni qué tan cálido estará. Siendo sincero, creo que cuanto más frío haga, mejor».

 

Max Verstappen sigue dando pelea para retener su título. Puede dar un nuevo concierto de manejo en el húmedo asfalto de Miami.

(Enviado especial de Visionauto a Miami, EE.UU)

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