“SE HIZO Y SE HACE DIFÍCIL, JE… “
Con rubrica de humor incluída pero con absoluta realidad, Gabriel Ponce de León, pinta su situación ante la pregunta de visionauto, sobre el complicado camino transitado y por transitar para la demorada confirmación de su continuidad en Turismo Carretera.
“Digo que se hace difícil , porque si bien ya acordé con Daniel Uranga, todavía me falta cerrar algunas cositas, aunque lo que es seguro es que arrancaré el campeonato en Viedma. Tengo confianza en que se vayan acomodando las tratativas con los patrocinantes y finalmente termine de solucionar lo pendiente y complete toda la temporada”, cuenta Gaby sobre su llegada a Uranga Racing, tras desvincularse del G 129 de Mauro Giallombardo. Lo que no camba es su fidelidad de 318 carreras a la marca Ford, con un auto cuya atención compartirán el equipo, Mariano (hermano de Gabriel) y un chasista por designar. Roberto y Mariano Ponce de León, padre y hermano de Gaby, serán los responsables del motor.
“Me hubiese gustado tener todo arreglado pero la situación económica está muy complicada. Por ser la categoría más importantes, el TC siempre fue caro y ahora lo es más por la constante inflación. Con relación al año pasado los precios subieron por lo menos en un 50° con la posibilidad que por la actual inflación ese número siga aumentando. Ante este panorama las empresas replantean sus políticas. Algunas disminuyen los presupuestos publicitarios y otras se van”. agrega Ponce, quien próximo a cumplir 44 años, (14 de marzo) inicia su 22da. temporada en el Turismo Carretera..
-¿Temiste en algún momento quedarte sin correr?
-No me gustó demorar los acuerdos pero no tuve una gran preocupación de quedarme sin correr porque tenía la alternativa de las TC Pick Up, donde podía correr ya que los motores son nuestros. Por suerte se dio lo del TC, pero igual me gustaría hacer otras categoría, TC 2000 y Top Race por ejemplo, pero ahí ya es cuestión de disponer de un presupuesto, que en mi caso, lo utilizo para el TC.
–Hablas del TC 2000. Fuiste tricampeón y referente en su gran época ¿cómo lo ves ahora?
-No está pasando por un gran momento, pero poco a poco con el trabajo de sus nuevos dirigentes se está recuperando. Sufrió el alejamiento de las terminales que eran su gran apoyo, y que se fueron no sólo de la categoría sino del automovilismo. Espero que el TC 2000 se recupere porque tengo buenos recuerdos, ya que fue la primera categoría que me abrió las puertas luego de salir campeón en la Fórmula Renault.
-Volviendo al TC, ¿Sentirá la categoría la ausencia de Canapino?
-Si, porque es una de sus grandes figuras, pero más lo va a sentir la gente de Chevrolet, que en poco más de un año, perdió a dos grandes campeones como Ortelli y Canapino. Igual para la categoría será un golpe, porque Agustín era uno de sus referentes. Como positivo puede tomarse que ese alejamiento abre la posibilidad a nuevos pilotos…
–El 3 de marzo, dos días antes de la carrera en Neuquén, se cumplen 10 años de tu última victoria, y justamente fue en ese circuito. ¿Crees que todavía podés volver a ganar en el TC?
-Si. Ganar no es fácil en ninguna categoría. Y menos en el TC, pero no pierdo la esperanza de volver a ganar. Por eso sigo corriendo. De lo contrario me hubiese ido a mi casa. Y ya que mencionaste el aniversario ¿por qué no pensar en que puedo volver a ganar en Neuquén al cumplirse los 10 años sin triunfos?. Estaría bueno, ¿no?
Vaya que estaría bueno volver a ver un Gabriel Ponce de León ganador en el Turismo Carretera. Además de la satisfacción personal, sería el premio a su familia, fiel compañera en el duro camino por mantenerse en el TC.
