“ES ESTÚPIDA”.
Sin vueltas ni anestesia, Fabio Quartararo calificó así la implementación de una carrera Sprint en todas las fechas de Moto GP de la próxima temporada.
“Si lo hacemos de vez en cuando, como la Fórmula 1, puede ser interesante. Pero cada sábado, no… Hay pistas como Assen e Mugello en las que acabas agotado físicamente cuando termina la prueba”, comentó el campeón mundial sobre la decisión anunciada en la previa de la clasificación (ganada por Enea Bastianini con Ducati) del Gran Premio de Austria.
Según lo informado poe las autoridades, las carreras Sprint se correrán los sábados sobre la mitad de recorrido del Gran Premio, otorgarán el 50% de los puntos y no tendrán injerencia en la formación de la grilla de la competencia final. ”Igual quedan algunos puntos por ajustar”, aclaró Herve Poncharal, titular de la Asociación de Equipos (IRTA)y uno de los participantes de la conferencia de prensa junto a Jorge Viegas, presidente de la Federación Internacional de Motociclismo y Carmelo Ezpeleta, director de DORNA, la empresa que regentea el Mundial de Motociclismo.
No hubo pilotos en la reunión. “A los pilotos les deben informar sus equipos, siempre hemos utilizado esas vías, nosotros hablamos con los pilotos de la seguridad, pero no del formato…” explicó Ezpeleta en una nueva muestra de la actitud autoritaria con la que desde hace varios años maneja el campeonato. “No creo que hay sido correcto hacer un cambio sin la opinión de los pilotos”, retrucó Quartararo sobre la base de la elemental lógica para este tipo de situaciones.
Hubo otras voces destacadas en contra de la novedad, entre ellas la de los hermanos Espargaró. “No me gusta nada esa posibilidad. Esto es MotoGP, no un campeonato con motos de calle. Aquí hay muchos ingenieros, mucha electrónica. Con el formato actual ya es difícil poner a punto la moto, pero si nos quitan más entrenamientos, será complicadísimo”, declaró Axel mientras que su hermano Pol puntualizó que “la idea es que vamos a tomar el doble de riesgo, haciendo el mismo trabajo y cobrando el mismo dinero. Vamos a correr dos veces en un mismo fin de semana, y eso significa más riesgo para adelantar. Sé que se hace en el Mundial de Superbike (entre las dos finales se corre una mini carrera denominada Superpole) pero estas motos son más rápidas y más pesadas”.
También se han escuchado opiniones favorables al cambio. y una fuerte, la de Marc Marquez en plena recuperación luego de la cuarta operación en su brazo derecho. «Las carreras Sprint harán más espectacular al Mundial», sentenció el español quien mantiene la incógnita sobre sus regreso a las pistas. También a favor el australiano Jack Miller. “¿Por qué no probar? Creo que será un buen elemento para el espectáculo y algo que encantará a los aficionados. Evidentemente que incrementa el riesgo, pero somos pilotos y atletas, no bailarinas…”, sostuvo el excéntrico Miller. Adhirió a su opinión el español Maverick Viñales con este argumento: “No he probado nunca una carrera Sprint. Lo he visto en Superbike y me gusta; creo que nos divertiremos. Esto es un show y tenemos que potenciarlo”.
Queda claro que la idea de este cambio es potenciar ese show, más allá de mejorar espectáculos en pistas que, con algunas excepciones han mantenido su interés. Un show al que no le faltan carreras sino más fábricas (se retira Suzuki a fin de año), y un show que fundamentalmente siente y mucho las ausencias de ídolos y referentes como Valentino Rossi, Jorge Lorenzo y Marc Márquez, generadores de los últimos grandes duelos. Son falencias que no se solucionan con decisiones en un escritorio.