LECLERC, POR LA REVANCHA.
Bakú es un circuito que le provoca especiales recuerdos a Charles Leclerc. En este escenario del Gran Premio de Azerbaiyán, el monegasco logró en 2017 en sus tiempos en la Fórmula 2 un triunfo a pocos días de la muerte de su padre, impulsor de su campaña deportiva. El año pasado, ya en la Máxima, como piloto oficial de Ferrari marcó la pole aunque en carrera terminó cuarto.
“No la esperaba, porque no había andado muy bien en las tandas iniciales pero en la definitiva puse todo y se dio” reconoció luego que el múltiple campeón de motociclismo Michael Doohan (su hijo corre en la Fórmula 2) le entregase el trofeo-neumático por su pole número 15, la sexta en 8 fechas del actual campeonato, la tercera consecutiva y la segunda seguida en Bakú.
Ahora le queda el desafío de la carrera para reencontrarse con esa victoria que también imaginaba desde las poles de España y Mónaco, pero que por motivos ajenos a Charles (rotura del motor en Montmeló y mala estrategia de Ferrari en el Principado) se le escapó. Necesita Leclerc esa victoria para que esa diferencia de 9 puntos que le sacó Max Verstappen no siga aumentando. También para que no se agigante la amenaza que apenas 6 puntos detrás representa Sergio Pérez, el compañero de Vertappen en el equipo Red Bull.
“Los Red Bull van muy fuertes en ritmo de carrera” advierte Leclerc sobre sus principales preocupaciones. Es cierto. Habrá que ver cuál es la estrategia de Red Bull. ¿Priorizar los intereses de Verstappen como líder del campeonato o darle libertad a Checo Pérez aprovechando su gran momento que por segundo Gran Premio consecutivo lo vio clasificar por sobre su compañero campeón mundial?
Se verá en un Gran Premio de Azerbaiyán abierto a muchas alternativas con un trazado tipo callejero que a diferencia de Mónaco permite sobrepasos con su extensa recta, donde ´los más veloces llegan los 345 Km/h. pero como el circuito del Principado tiene muy cerca los muros y protecciones, dispuestos a cobrar muy caro cualquier error o exceso. Una combinación que junto con el marco de antiguos edificios que borden parte del trazado lo hace especial dentro del calendario. «Es una carrera llena de trampas y hay que estar atento y concentrado para estar alejado de ellas” asegura Fernando Alonso, quien desde el décimo lugar» ira en busca de un podio que clarifique su incierto futuro.