UN DÍA NEGRO EN LA PENÍNSULA ROSSA
No importa que Charles Leclerc haya llevado al podio a la problemática Ferrari SF-25 en el reciente Grand Prix de Arabia Saudita. Tampoco que la 499P Hypercar siga invicta este año en el Mundial de Endurance (WEC) tras ganar las 6 Horas de Imola (¡en el autódromo “Enzo y Dino Ferrari”!) con italianos como Antonio Giovinazzi, Alessandro Pierguidi y James Calado (inglés, pero con apellido peninsular).
No importa nada de eso.
A Dio, Santo Padre. pic.twitter.com/tHCr2aIdG1
— Giorgia Meloni (@GiorgiaMeloni) April 21, 2025
Italia está triste por la muerte del Papa Francisco y porque Lewis Hamilton no arranca. Aquella victoria en el Sprint de China parece un espejismo, un malentendido, un error histórico. Los 400 millones de euros comprometidos en el Proyecto Hamilton, impulsado por John Elkann desde comienzos de 2024, parecen estar destinados al desperdicio. Plata quemada, en honor a Piglia.
Lewis no se siente cómodo con la SF-25. No le puede extraer todo el jugo. Con ella, debe emplear técnicas que, en toda su vida anterior, léase utilizar un impulsor Mercedes, nunca se vio obligado a poner en práctica. Por ejemplo, usar el poder frenante del motor.
La SF-25 no se rompe, pero Hamilton no consigue imponerse a Leclerc. En las clasificaciones está invariablemente atrás.
Miremos lo que ocurrió en Arabia Saudita:
Q1: Leclerc, 1m28s552; Hamilton, 1m28s372 (-0s180)
Q2: Leclerc, 1m27s866; Hamilton, 1m28s102 (+0s236)
Q3: Leclerc, 1m27s670; Hamilton, 1m28s201 (+0s531)
La pista de Jeddah evoluciona mucho, es decir, los tiempos se mejoran rápido de una tanda a otro e, inclusive, del comienzo al fin de una tanda. Leclerc lo aprovechó, pero Hamilton no. El monegasco revierte el déficit inicial y lo agranda en cada tanda; el inglés no consigue nunca bajar de los 88 segundos para la vuelta.
En Bahrein, la carrera anterior, la dinámica fue exactamente igual:
Q1: Leclerc, 1m31s454; Hamilton, 1m31s219 (+0s235)
Q2: Leclerc, 1m30m724; Hamilton, 1m31s009 (-0s285)
Q3: Leclerc, 1m30s175; Hamilton, 1m30s772 (-0s597)
«Falta liderazgo»
Allí en Bahrein, Luca Di Montezemolo, expresidente de Ferrari, volvió a una carrera de F-1 después de una década y tuvo palabras muy duras contra el presente del equipo de Maranello:
«Este es un equipo al que en ciertos momentos le falta un líder, le falta liderazgo en el sentido más amplio», afirmó. “Me siento triste como aficionado porque veo un equipo sin alma. Ferrari es pasión, Ferrari trabaja día y noche, Ferrari nunca se rinde. Y también estoy un poco enfadado, porque esperaba, al menos este año, ver un coche realmente competitivo desde el principio”.
En ese momento, Montezemolo no eludió el tema Hamilton: “Sabe que tiene su última oportunidad; llegó a Ferrari para ganar y culminar su carrera. Adaptarse a una nueva forma de trabajar es difícil, pero el problema es tener un coche capaz de competir en el Mundial. Después de tantos años, necesitamos un coche ganador”.
En defensa de Lewis
El podio de Leclerc en Arabia Saudita mostró que las piezas nuevas que Ferrari llevó a Bahrein pueden habilitar el camino para hacer de la SF-25 un coche ganador. Y ese podio de Leclerc no habría sido posible, paradójicamente, sin la tarea de Hamilton.
La trajinada tarea que Lando Norris afrontó para dejar atrás a Hamilton, entre la vuelta 11 y la 15, le permitió a Leclerc, que en ese momento marchaba cuarto, sacarle 1s7 de ventaja a Norris.
Vuelta 11: 4s513 de Leclerc (4°) a Norris (7°)
Vuelta 15: 6s297 de Leclerc (4°) a Norris (6°)
Al final del Grand Prix, la diferencia fue:
Vuelta 50: 1s092 de Leclerc 3° a Norris (4°)
Sin esa resistencia de Hamilton a Norris en el primer tercio de la competencia, Norris habría alcanzado a Leclerc mucho antes y podría haberlo dejado atrás.
Pero Lewis no vio el vaso medio lleno, ni mucho menos. “Cero positivo hoy. Salvo por Charles terminando en el podio, lo que es muy bueno para el equipo”, declaró sin optimismo.
“¿La carrera? Fue horrible. Fue horrible. Nada agradable. Simplemente derrapaba. En el primer stint, un subviraje enorme, el coche no doblaba. Y luego una degradación masiva. Y luego en el segundo stint, un equilibrio ligeramente mejor, pero seguía sin ritmo. Sí, bastante mal. Me cuesta sentir el coche. Pero no hay nada en particular. No hay nada que diga ‘oye, este es el problema’. “Voy más lento en las curvas. Tenemos configuraciones ligeramente diferentes; tengo que ver si esa configuración es la que le gusta al coche. Sí, Charles y su equipo están haciendo un mejor trabajo, sin duda».
“Una rendición”
“Leclerc consigue un tercer puesto que se siente como una liberación. Es un soplo de aire fresco, un destello de magia que recuerda la victoria en el Sprint de China”, escribe Vincenzo Borgomeo en Formula Passion. “Pero no todo es color de rosa, seamos claros: Hamilton, séptimo, no brilla y el balance de Maranello sigue siendo duro”. Para la prensa italiana, hasta que Hamilton no esté en condiciones de ganar, nada será brillante en Ferrari.
“Hamilton en las sombras”, sugiere Guido Toninelli, enviado especial de La Gazzetta dello Sport a Jeddah. “Parecen haber pasado meses desde su victoria en el Sprint de China y el humor del piloto británico no podría ser más diverso que ahora (…) Al final de la carrera tuvo un arrebato que se parece a una rendición”, señala al comentar la declaración de Hamilton.
Mistero Hamilton: da colonna della rinascita Ferrari a quel «non sono a mio agio con la macchina» https://t.co/fEXlFQqIYZ
— La Gazzetta dello Sport (@Gazzetta_it) April 21, 2025
Para los italianos, Hamilton está rindiéndose. Peccato.