¿Cómo se encuentra Max? “Aún se queja de rigidez en el cuello”
Helmut Marko, asesor de Red Bull habló del estado de salud de Verstappen. Volvió a castigar duro a Hamilton y Toto Wolff y descartó una "venganza u otras estupideces". Opinó Agustín Canapino
Si se hablara de un siniestro con un auto de calle, de los tantísimos que se dan a diario lamentablemente, se debería calificar como «destrucción total», el estado visto del Red Bull de Max Verstappen.
Y de lo esencial, el estado de salud de Max, ¿que se puede decir? Lo habrás visto salir del auto luego del furibundo impacto contra las defensas, por sus propios medios si bien algo aturdido no fue para menos. Son contados los que puedan asimilar tamaño golpe con una fuerza de gravedad de 51G. Ha sido posible por el impecable estado físico de los pilotos y, merced a la invalorable seguridad ofrecida por los monoplazas de Fórmula 1. Ni pensar las eventuales consecuencias, si el accidente se habría producido en otras épocas.
Mientras tanto, las derivaciones del incidente surgido cuando Lewis Hamilton tocó con el Mercedes la rueda trasera del Red Bull, no han parado de multiplicarse. Tampoco las especulaciones a futuro, acerca de la forma en que prolongarán la ahora más que nunca, batalla por el título.
¿Cómo se encontraba Verstappen?. El inflexible Helmut Marko, asesor del equipo Red Bull, dijo: “Aún se queja de rigidez en el cuello”. Y acotó en diálogo con el canal de televisión RTL de Alemania: «Después del gran premio en el hospital y luego en el hotel donde pasó la noche para estar seguros, estuvo acompañado por su padre (Jos, conocido ex piloto también de F-1). Esperábamos que todo su cuerpo se sintiera rígido después de ese increíble impacto de 51G. Por suerte, sólo le duele el cuello, pero por lo demás está bien”. Y reafirmó, “una persona normal no sobreviviría a un impacto tan fuerte de 51G. Por supuesto que está muy bien entrenado y eso también jugó un papel importante para salir con sólo el cuello dolorido”.
Marko no es de guardarse lo que piensa.
Marko sostuvo al día siguiente durante una entrevista con el diario austriaco OE24, “Max regresó a su casa en Montecarlo, su fisioterapeuta está trabajando con él. Pensé que no podría moverse durante un par de días”.
Después Marko hizo una necesaria y sensata aclaración, «desde ya, no apuntaremos a una venganza u otras estupideces, no llegamos a ese nivel”. A la vez reconoció, «estamos a favor de las carreras duras pero justas, no con acciones irresponsables que ha sido como calificamos la acción de Hamilton”.
“La relación se volverá aún más tensa y será emocionante para los aficionados, pero nos comportaremos dentro de las reglas y métodos deportivos justos”, sentenció Marko quien no dudo en volver a apuntar en tono crítico por su comportamiento en Silverstone, a Toto Wolff, jefe del equipo Mercedes. “(Wolff) irrumpió en la sala de control de carrera inmediatamente después del accidente, lo hizo para contar la versión de Mercedes. Ese es un lugar neutral, así que nos molestó que intentara influir en los comisarios”. A propósito, ¿te suena una actitud así?, es muy habitual en el automovilismo argentino ante situaciones conflictivas ocurridas en una pista.
El final por ahora, con un toque argentino a cargo de Agustín Canapino. Escribió el Titán en su cuenta en Twitter:
Agustín Canapino
@AgustinCanapino
Leclerc, Palmer y varios más opinando que fue incidente de carrera, eso fue, ambos provocaron el accidente, VER en su habitual excesiva defensa y HAM se cansó de resignar. Max es crack, pero sigue siendo inmaduro, el día que aprenda a perder, será mucho más completo que hoy.
