LA MECANICA ARGENTINA Fórmula 1, tuvo su espacio en el automovilismo argentino, allá a mediados de los años 70. Autos muy elaborados para la época, potentes motores, figuras tratando no sólo de manejarlos, también de domarlos.
Aún sobreviven algunos de aquellos exponentes, es más suelen competir. Acá queremos mostrarte una joya de la F-1 que supo tener el país. Se trata de un Berta con motor Dodge V8 que perteneciera al equipo oficial de la Comisión de Concesionarios Chrysler que presidió el histórico dirigente Luis Strianesse.
A este auto lo manejó el Profesor Jorge Omar del Rio para ganar las 250 millas de Rafaela de 1975 a un promedio de 235 km/hora; sí, 235 km/h!.
Mirá sus características técnicas: chasis Berta 103/73. Motor Dodge V8. Preparación: Hermanos Aldo y Reinaldo Bellavigna. Embrague multidisco. Carburador Weber 48/48 italianos. Distribución: ACCEL doble platino (EE.UU). Bobina Mallory (baquelita EE.UU). Bomba nafta Stewart Warner también importada desde EE.UU. Caja puente Saenz con 5 marchas–autoblocante
Además de Del Río, con el transcurso del tiempo también corrieron con este auto: Carlos Lerma (San Carlos), Rubén Taborda (Rustinla), Víctor Betati (El Trébol), todas localidades de la provincia de Santa Fe).
Este Berta-Dodge ha sido completamente restaurado, manteniendo su estado original. La idea de su propietario es mostrarlo en un futuro museo.
Lindo auto!!
Les corrijo: Rubén Taborra de Bustinza.
Hermoso el auto!
si nuestros gobernantes no hubieran errado los rumbos económicos, no sólo nuestra calidad de vida sería mejor, también podríamos seguir teniendo una categoría sin nada que envidiarle al mundial de f1. con circuitos de 1ra y con algún que otro campeón más, a parte de Fangio. en fin, soñar no cuesta nada…
que desperdicio por dios! como puede ser que teniendo al mago no podamos tener una categoría argentina de monopostos con un terrible V8 con desarrollo. cuanto talento desperdiciado, tener tantos cráneos para que terminen haciendo motores para los escalectrix monomarcas que tenemos aca….
Sin duda una epoca maravillosa,ojala logren hacer algo para ver estas maravillas otra vez.