DESTROZÓ A SUS RIVALES.
Ni la lluvia torrencial, ni una pista muy complicada, ni el lastre de 50 kilos… Nada pudo detenerlo a Manuel Luque que, una vez más, exprimió todo el potencial del Renault Fluence del Ambrogio Racing para, en Paraná, sumar su cuarta final ganada sobre las ocho disputadas que lleva la temporada del TC 2000.
El santafesino, que ha sacado una diferencia que parece indescontable en el campeonato a falta de cuatro fechas, largó desde la pole y, a pesar de los intentos de Marcelo Ciarrocchi con el Linea del PSG16, supo mantenerse a pesar de senadas neutralizaciones para sumar un nuevo éxito y recuperarse de la mala faena de San Luis.
“La verdad que la pista estaba muy difícil. Después de tanque llenos se trabajó para que el auto funcione bien debajo de la lluvia y por suerte lo logramos. Esta es la cuarta victoria del año, es realmente es increíble conseguir tantos triunfos. Este fue un paso más, pero estoy tranquilo, tengo que estar con la cabeza fría y tratar de seguir sumando puntos para conseguir el objetivo a final de temporada”, señaló Manu.
En definitiva, Ciarrocchi debió confirmarse con un segundo puesto que lo dejó como escolta en el campeonato, mientras que el último lugar del podio pasó de ser para Martín Chialvo, con el Ford Focus del FELA, pero, tras su exclusión, heredó el puesto Agustín Lima Capitao con el Peugeot 408 del DTA.
Cumplidos dos tercios del campeonato, Luque se alejó un poco más y suma 292 puntos, seguido por Ciarrocchi con 207. Luego, muy lejos, aparecen Mariano Pernía con 179 y Federico Iribarne con 171. La próxima, el 8 de octubre en el Oscar Cabalén de Córdoba.
Por Cristian Re.
Fotos: prensa TC 2000.
