ES UNO DE LOS PRINCIPALES coletazos que ha tenido el caso Gurí Martínez.

Además de la suspensión y su extensión de cuatro fechas (opinable por cierto), y la multa de 200 mil pesos que debe abonar dentro de los 30 días en partes iguales a la Fundación Favaloro y los hospitales Pedro de Elizalde, Garrahan y Ricardo Gutiérrez ($ 50.000 para cada uno), aplicada al entrerriano por la tremenda metida de pata en Concordia con el motor de su Forcito, la ACTC puso su mirada en la Subcomisión Técnica encabezada por el ingeniero Alejandro Solga.

Y la evaluación acerca de lo actuado por la Técnica, no sólo en el conmocionante episodio en Concordia, con la exclusión del Gurí, también se retrotrajo al año pasado, y el balance no fue el mejor. Tampoco fueron bien recibidos en la directiva, ya circunscribiéndose al controversial finde, declaraciones expresadas por Solga en Concordia, al sostener que no revisaban motores por completo todas las carreras, porque muchas veces, veía a los mecánicos extenuados luego de varios días de intenso trabajo, apuntando que en esos casos contemplaba «el lado humano».

 

En Olavarría, la Técnica a cargo de Luis Miraldi

 

Un reflejo concreto de estos avatares, entre los que tampoco se puede dejar de lado la aparente interna entre Solga y Marchese hijo, ha sido la absolutamente inhabitual medida de la ACTC, de haber resuelto vinculado al área técnica y en plena temporada, la designación como supervisor y coordinador de la Técnica, Luis Miraldi, miembro de la directiva, cuya labor podría extenderse por dos fechas.

La presencia de Miraldi, deriva en otra novedad que no es menor, Solga no va a Olavarría; la ausencia dispara especulaciones. ¿Cual será el futuro del ingeniero?, ¿permanecerá en la Subcomisión Técnica o le asignarán nuevas funciones?.

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Por C.S
Foto: VA

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