HÉCTOR NAVONE tenía la pasión de los periodistas de antes y el entusiasmo de los jóvenes colegas. Por eso ya con 70 años y medio siglo en la profesión, siguió transitando los circuitos incluso trasladándose con su casa rodante y la permanente compañía de su esposa. Todo un ejemplo de pasión y sacrificio. Lástima que en los últimos años lo fue doblegando la enfermedad que el miércoles 5 puso fin a su vida de 76 años.
Iniciado en 1958 con las transmisiones radiales de Eduardo Emilio D´Agostino, formó luego su propio organización junto a José Luis Barraza y Jorge Drago.Vivió a pleno los años de las Vueltas y los Grandes Premios del TC , sus noches de Gala, los autódromos desbordantes, la variedad de ídolos, el paso de Carlos Reutemann por la Fórmula 1. Años donde los relatos de las transmisiones radiales eran el sonido mágico con el que automovilismo se expandió por todo el país. Años y situaciones que Héctor recordaba y añoraba en sus últimos pasos por los circuitos, en esas charlas a la que era tan afecto. Quienes tuvimos la suerte de conocerlo lo extrañaremos.
Por el equipo de VA
Bien dicho: extrañaremos a este afable y popular colega. Que descanses en paz, Héctor.