OTRA VEZ SOPA ENTRERRIANA.
¿Quién le gana a Mariano Werner en el TC? es la pregunta que salta ante este brillante momento del piloto entrerriano y tras otra contundente demostración sobre un Ford que no parece sentir los 40 Kg de lastre.
Mariano sumó en Viedma su segundo triunfo consecutivo, el tercero en las últimas cuatro carreras y el cuarto de la temporada. Cifras que no se corresponden con esa más amplia distribución de los festejos que la categoría ve con agrado y para la que desde hace unos años rato implementó el sistema de lastre. El mismo que actualmente con su 40 Kg, Mariano sufre más que ninguno pero sin que le impida controlar y dominar las carreras a voluntad como en tono de tibio reclamo dicen su rivales. Misterio del TC.
“Me llama la atención que Mariano maneje la carrera a su gusto con un auto muy pesado” dijo Leonel Pernía, su permanente escolta sin ninguna chance de superarlo en 20 vueltas que parecieron más largas por la escasez de atractivos. ”Anduve al límite con el gran auto que tuve pero no lo pude correr a Werner” reveló Mauricio Lambiris, otro que necesitaba la victoria pero que no pudo hacer nada ante el inalcanzable Ford rojiblanco, que según lo contado por Werner compensó los kilos de más con unos HP extra que el motorista Rody Agut pudo sumar en relación a la anterior carrera.
“Intenté darle lucha a Mariano en la primera curva pero no pude hacer nada. Dobló más rápido y se fue. Tiene un auto superlativo” fue la extrañamente resignada visión de Agustín Canapino, tras el efímero duelo en la serie inicial. En la final, Agustín cumplió sin problemas el objetivo de “ser el mejor Chevrolet” que le dio puntos para quedar a 13,50 de Werner como escolta en la Copa de Oro a dos fecha del final. Astuto y estratega como es, el Titán habla poco, piensa mucho mucho y focaliza la mirada en el par de fechas finales, especialmente Villicum, para entrar en acción con un Chevrolet más liviano y con mejor ritmo.
“Recién después de la última carrera sabremos si hicimos bien o no en ganar esta carrera”, ha sido el especial interrogante que se planteó Werner tras la nueva victoria. Nunca es bueno por la salud del deporte, resignar un triunfo, sin embargo a los fines prácticos de los actuales reglamentos, hay quienes creen, en el caso del TC, que sirve para no cargar kilos. De haber entregado el triunfo Werner se hubiese ahorrado los nuevos 10 kilos que debe sumar para la próxima en Toay. Igual no hubiese sido un gran negocio porque hubiera habilitado con la victoria a rivales directos como Pernía o Lambiris, además de dejar puntos (al menos tres), que puede sentir en el momento de las cuentas finales.
Por eso, pase lo que pase con la definición del campeonato, no te arrepientas Mariano de haber ganado. Sabés cuantos quieren hacerlo y no pueden.