¡POR FIN…!
Por fin un ganador que no fuera Lewis Hamilton.
Por fin un podio sin un piloto de Mercedes Benz, en uno de sus escalones.
Por fin una carrera con un final incierto hasta la caída de la bandera de a cuadros y definida por menos de un segundo sin que hubiese un juego de equipo.
Por fin un nuevo ganador, un dato estadístico que desde el año pasado con Charles Leclerc en Bélgica no aportaban las carreras del campeonato mundial.
Por fin un ganador como Pierre Gasly, con una dosis de expresividad por encima del nivel medio en la Fórmula 1 como se vió en sus efusivos festejos en el podio, la felicitación de varios de sus colegas y la alegría que su triunfo generó en el ambiente.
Por fin la Marsellesa se escuchó en el podio para saludar un ganador francés tras los 24 años que pasaron de aquel triunfo de Olivier Panis en una alocado Gran Premio de Mónaco 1996.
Todas, las nuevas sensaciones que la F-1 estaba necesitando para salir de la monotonía impuesta por el dominio de las Flechas Negras de Mercedes Benz, las entregó un Gran Premio de Italia. La carrera recuperó su esencia histórica, de repartir altas emociones con su trámite rubricado por la angustiante victoria de Pierre Gasly, postergando con lo justo las ansias de otro de los postulantes a ganador primerizo como Carlos Sainz.
Es cierto que todo pudo haber sido distinto, o mejor dicho igual a lo que se hizo costumbre, si Hamilton y su equipo no cometen el grosero error de ingresar a boxes en un momento no permitido, tras el primer auto de seguridad por la detención del Haas de Kevin Magnussen. Un error que suena inconcebible para un equipo del nivel perfeccionista de Mercedes Benz. Sin embargo, existió para confirmar que nadie es perfecto, y que no hay excepciones para el error en el mar de los imponderables que marcan una carrera de autos.
«Una vez que salió el coche de seguridad, pusieron en rojo la entrada al pitlane, pero no era exactamente rojo, eran dos cruces amarillas en el exterior. Uno de los estrategas gritó por radio mientras Lewis entraba al pitlane. Hubo una confusión. No pudimos ver las señales, y eso fue sólo una secuencia de eventos que le arruinaron la carrera a Lewis. No estoy feliz, pero hay que aceptarlo», explicó Toto Wolff, director deportivo de Mercedes.
Hamilton reveló después de la carrera que no había vista las cruces amarillas en los tableros a un lado de la pista, advirtiendo de que el pitlane estaba cerrado, y aceptó la culpa del error. «Sinceramente no vi esas señales, así que me hago responsable de eso. Es algo de lo que aprenderé. Ser séptimo y aún así conseguir la vuelta rápida, siguió siendo un buen resultado, teniendo en cuenta que no creía que fuera posible cuando me quedé a 26 segundos del pelotón. Así que lo acepté incluso estoy agradecido, porque Verstappen no sumó ningún punto. Así que no fue una gran pérdida», se consoló el campeón.
¿La perdieron Hamilton y su equipo o la ganó Gasly? Es la pregunta que surge sobre el resultado de la octava fecha del Mundial. Un poco y un poco. La perdieron el inglés y los responsables estratégicos de Mercedes, porque está claro que sin ese error que derivó en una sanción de un pase y siga por boxes, el Mercedes número 44 probablemente hubiese sido inalcanzable en punta, como lo era hasta el momento de la detención de la carrera (vuelta 27). El momento del violento golpe de la Ferrari de Charles Leclerc en la Curva Parabólica, que dañó las defensas pero no causó lesiones al monegasco.
Una superioridad que Hamilton reiteró en el reinicio de la carrera con esa escalada que al volver a pista tras la detención para cumplir la sanción de pase y siga, lo proyectó del 17° y último lugar al 7° final. Junto con el récord de vuelta le sirvió al inglés para juntar siete puntos y mantener su ventaja de 47 (164 a 117) con la que llegó a Monza pero ahora sobre el nuevo escolta que vuelve a ser su coequiper Valterri Bottas (de opaco quinto puesto tras un mala largada) ante el mal domingo de Max Vertappen, marginado por un problema en el motor de su Red Bull.
También es justo decir que, al Gran Premio de Italia lo ganó Pierre Gasly. Cierto que el retraso de Hamilton le abrió el camino a este francés, fanático del fútbol, hincha de la Roma. Otro promisorio que en 2013 se coronó en la Eurocup Fórmula Renault, en una temporada que tuvo entre sus rivales al argentino Carlos Merlo. Pero también vale resaltar que Gasly, supo aprovechar esa oportunidad con un andar firme y sin errores, que distó de ser tranquilo ya que debió aguantar la creciente presión de Carlos Sainz con un McLaren que pareció más sólido y veloz que el Alpha Tauri del francés.
Quedó la duda de saber si Gasly hubiese podido aguantarlo una vuelta más a Sainz, sin que el interrogantes le quitara justicia al triunfo a Pierre. Uun personaje muy querido en el ambiente por su reconocida sensibilidad, demostrada días atrás en Spa-Francorchamps al recordar a Anthoine Hubert, el colega muerto el año pasado en esa pista belga en una carrera de Fórmula 2, con quien Pierre compartió la amistad desde que juntos cursaron el jardín de infantes.
Doce años atrás en el mismo Monza, un piloto en ascenso, como en aquel momento lo era Sebastian Vettel, logró sobre un modesto Toro Rosso, el antecesor de Alpha Tauri, un sorpresivo y meritorio triunfo que lo proyectó a la consideración general, y a una campaña que con el transcurrir del tiempo se vería jerarquizada con cuatro títulos mundiales consecutivos. El futuro mostrará el significado del semejante triunfo para Gasly.
Por ahora tiene el de la reivindicación, luego de los cuestionamientos que el año pasado sufrió de sus duros jefes en Red Bull, y que derivó a mediados de temporada en su “degradación” a Alpha Tauri y su reemplazo por Alex Albon. El mismo Albon que en Monza llegó 15° y anteúltimo…
justo es decir que Gasly fue batido por max en cuanta carrera corrió para Red Bull el año pasado. tengamos memoria, ni antes era un queso ni ahora es futuro tetra campeón. es un joven piloto con condiciones pero que tiene mucho por demostrar todavia.
Estimado pedro tvrde, fiel seguidor de vison
Rescato tu comentario sobre Gasly pero aclaro que en ningún momento anticipé qué ganará cuatro títulos. Simplemente planteó en la comparación con lo que pasó hace 12 años con Vettel sobre el significado que tendrá este triunfo en su futuro. Puede que sea el primero de muchos o que quede como el único. Depende de muchos factores, entre ellos del propio Gasly.
En cuanto a la comparación con Verstappen, es cierto que el holandés lo superó siempre, pero no olvidemos que en Red Bull se trabaja para Verstappen. Pasó con Gasly, con Kvyat y ahora pasa con Albon. El único que le hizo sombra, por su mayor experiencia fue Ricciardo, pero en cuanto Max creció se tuvo que ir.
Por ultimo vale tomar este triunfo de Gasly como una reivindicación de alguien que en su momento fue casi humillado por sus superiores. Una situación que suele darse en todas las actividades de la vida.Por eso alegra que de vez en cuando alguien pueda desquitarse.
Saludos.
T
Es valido este intercambio de opiniones,hay verdad en los dos comentarios.A mi no me queda tan claro que RB trabaje para Verstapen,en todo caso el equipo prioriza sus estrategias de carrera porque casi siempre supera los sabados a sus coequipers.Aclaro que NO soy hincha del holandes,porque me hace acordar mucho a Schumacher.
Saludos a los dos desde el sur.