EL DÍA DE LOCOS VIVIDO EN EL EQUIPO FRANCÉS. RENUNCIÓ OAKES, FLAVIO ASUMIÓ LA DIRECCION TOTAL, Y FRANCO PILOTO TITULAR AL MENOS EN LAS VENIDERAS CINCO FECHAS.
No es nuevo el clima caótico que vive Alpine como tampoco lo son los movimientos de sus integrantes en los distintos cargos y niveles. Movimientos que ni siquiera respetaron una figura de leyenda para los franceses como Alain Prost, a quien a fines del 2021 no se le renovó el contrato como asesor para permitir el ingreso de Omar Szafnauer, quien aportó el patrocinio de BWT, la empresa dedicada el tratamiento de agua que todavía conserva el equipo francés.
En cambio, ya no está Szafnauer en cuya salidaentre otras cuestiones tal vez influyó el poco acompañamiento que para su ascenso como titular a la Fórmula 1 le dio a un joven que prometía mucho en la Academia de Pilotos de Alpine y terminó alejándose a McLaren. Ese joven era Oscar Piastri.

A Szafnauer siguió un interinato más extenso de lo previsto de Bruno Famin que terminó en julio del año pasado con la incorporación de Oliver Oakes. La flamante renuncia de Oakes anunciada un par de días después de la carrera de Miami, abrió l camino para que Flavio Btriatore tomara el poder total al sumar el cargo de director deportivo al de asesor que tiene desde el año pasado. El polémico italiano se convirtió así en el tercer ocupante de ese puesto en menos de un año. No es lo mejor para un equipo con pretensiones de cierta figuración.y representante de una marca prestigiosa.
FRANCO PRUEBA EN ZANDVOORT CON UN MODELO ANTERIOR
Sensible a todo lo que pase sobre un Alpine hubo entusiasmo en la Argentina al ver un auto francés girar en el circuito de neerlandés de Zandvoort. Se desilusionaron al comprobar que no lo manejaba Franco Colapinto sino el japonés Ritomo Miayata, piloto de Toyota Gazoo Racing.
El turno del argentino llegó al día siguiente con su sesión de pruebas, fue sobre un Alpine de 2023, programada para que llegue en las mejores condiciones a su regreso a F-1, el 18 de mayo en el Gran Premio de la Emilia Romagna en el circuito italiano de Imola.
Nada es casual en la Fórmula 1 y por eso más allá que en el comunicado oficial que anunció la renuncia de Oakes, Alpine no explicó los motivos, todo indica que además del flojo rendimiento del equipo (está anteúltimo en la Copa de Constructores con 7 puntos) mucho tuvo que ver el desacuerdo entre Oakes y Briatore por el cambio de pilotos que produjo el equipo con el alejamiento de Jack Doohan y el ingreso de Franco Colapainto. Frente a una situación que formaba parte de las especulaciones desde principio de temporada, Oakes era partidario de darle más tiempo a Doohan, mientras que, más pragmático, interesado y hasta más cruel, Briatore empujaba la llegada del argentino entusiasmado con sus fpoderosos patrocinantes, factores determinantes en este cambio por encima que Doohan no haya contribuido con buenas actuaciones. Esta actitud de Flavio era algo que se percibía desde que formó parte decisiva en el traspaso de Colapinto desde Williams a Alpine incluso con un aporte económico proveniente de los patrocinantes del argentino. Nadie, y menos alguien con la ambición y el conocimiento de los negocios como Briatore, realiza ese tipo de gestiones y movimientos para tener a su piloto sentado en el banco de reserva.

Con todas estas circunstancias y la manija entera en poder de Briatore, su gran propulsor, solo era cuestión de esperar la formalidad del anuncio oficial de Alpine para saber que finalmente se hacía realidad el tan conversado retorno de Colapinto a Fórmula 1.
Un regreso que, según lo destacado en el comunicado del equipo informándose del cambio, será en principio por las próximas cinco carreras (Imola, Mónaco, España,Canadá y Austria). Casi el mismo plazo que tuvo Doohan, hace poco extendido por Oakes al australiano al adelantar que no habría cambios hasta el parate del verano europeo.
¿Deberá soportar Colapinto la misma presión que tuvo Jack?. Difícil teniendo al jefe de su lado como es el caso de Franco. Claro que tampoco podrá confiarse frente a una tarea nada sencilla, a encarar en un momento complicado del equipo.
Además y por último por si restara algo, ha advertido el autoritario Briatore «si un piloto no me entrega los resultados esperados no me tiembla el pulso para echarlo…». Ya lo mostró con Doohan.
Sera un field test de 5 carreras. El espaldarzo, llega con aval comercial de machacantes bien crocantes y con el guiño de hacerlo en un circuito conocido y donde supo de victorias FC43. Es de esperar que resulten venturosas todas las salidas a pista, para continuar mas alla del GP austriaco. El tiempo, llego.