ESO SI, POR FORTUNA NO TUVO CONSECUENCIAS FÍSICAS. UNA SEMANA ANTES EN TC EN BUENOS AIRES, ACORDATE,   LA PIÑA EN LA S DEL CIERVO.

No son días tranquilos para Matías Rossi sobre un auto de carrera. El Misil volvió a ser noticia, y no de las más gratas, cuando todavía se habla de su vuelco con el Toyota Camry en la clasificación del Turismo Carretera en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez y de la importancia que las medidas de seguridad tuvieron para que Matías saliese sólo con un golpe en el pie izquierdo.

A una semana de aquel accidente, Rossi vivió otra difícil situación sobre un auto de carrera. Esta vez fue en el circuito brasileño de Goiania, donde el Stock Car Brasileño cumplió su séptima fecha.

Tras culminar undécimo en la competencia inicial, Matías tomó parte en la segunda que tenía la particularidad de ser la Carrera 600 en la historia de la categorái. No llegó muy lejor porque los primeros metros su Toyota  del Full Ttime Sports fue tocado por los Chevrolet de Julio Campos y Tony Kanaam. No terminaron allí sus complicaciones ya que posteriormente, el auto de Rossi   recibió otros toque que lo dejó cruzado en medio de la pista donde fue embestido por Guilherme Salas

Obviamente la situación motivó la intervención de los auxiliares de pista que asistieron a  Rossi y lo derivaron al centro médico del circuito, donde los chequeos correspondientes costataron solamete algunos golpes, pero  la inexistencia de lesiones importantes. Otro susto más con suerte para el Misíl.

 

.

-publicidad-

 

Foto portada: captura TV

Imagenes: Stock Car.

-publicidad-


DEJÁ UN COMENTARIO

Por favor escribí tu comentario
Por favor ingresá tu nombre