PARECÍA CASI IMPOSIBLE PERO…
… como le dijo Kevin Benavides a Visión apenas llegado al campamento cordobés lindante al Estadio Mario Kempes, “la esperanza es lo último que se pierde…”.
Unos segundos antes el salteño había recibido el ”Bravo Kevin “ de Martino Bianchi, su exdirector deportivo en el equipo Honda (actualmente realiza notas para la televisión italiana), y un par de minutos después fue saludado con un “Grande Kevin” por uno de los integrantes del equipo Honda. Todo esto acompañado por los aplausos y vítores de un público que se bancó una larga espera (llegaron casi a las siete de la tarde) bajo el implacable sol, con tal de ver a quien es la máxima esperanza argentina en este Dakar.
Atrás había quedado una larga jornada que revitalizó un poco la ilusión de Kevin en ser el primer argentino en ganar un Dakar en motos, y quien rompiera esos 16 años seguidos de victorias de KTM, que pretendía continuar el austríaco Matthias Walkner. Con un espectacular andar Benavides le descontó 9m30s a Walkner. Un poco más (11m32s) le rebanó Toby Price, (KTM) ganador de la etapa San Juan-Córdoba y tercer integrante del grupo con aspiraciones al trofeo mayor.
Con la última jornada por disputarse son 22m31s los que separaban al líder Matthias Walkner de Benavides, con Price, a 27m45s a la expectativa Parecía una ventaja definitoria para el austríaco recordando los 102 km de velocidad, que apenas proponía la etapa rulo que los devolverá al campamento del Kempes. Parece casi imposible, pero como dijo Kevin “la esperanza es lo último que se pierde”. Un dicho que un Dakar tiene más valor que nunca.
Por Miguel Sebastián (Especial desde Córdoba)
Fotos: Mónica Paz
