«QUIERO GANAR ESTE DESAFÍO GUARANÍ y también correr el Dakar del año que viene…».
Kevin Benavides tiene claro sus objetivos para este Desafio Guaraní y mucho más luego de haber ganado la etapa inicial que unió Asunción con Villarrica. Un objetivo va unido al otro porque esta cita paraguaya forma parte del Dakar Series que entrega a los pilotos aficionados, como este salteño de 25 años, la posibilidad de acceder directamente y sin mayores costos a la próxima edición del Dakar.
«Aprendí de mi accidente en el Desafio Ruta 40 y ahora corro más con mentalidad de Cross Country que de Enduro. Por eso anduve con mucho cuidado en los tramos de barro, para no cometer errores…», contó Benavides, tras bajarse vencedor de su Honda en el campamento de Villarrica, donde el frío del atardecer se hizo sentir. A favor del salteño jugó el martes complicado de Javier Pizzolito y David Casteu, los principales candidatos en motos. El argentino tuvo problemas de navegación en su Honda y perdió media hora. Quedó tercero. Peor le fue al francés que debió abandonar por problemas de motor en su KTM.
La alegría argentina del triunfo de Benavides tuvo su contrapartida en los autos con la amargura provocada por el abandono de Juan Manuel Silva, el gran favorito. Problemas en el motor de su Prototipo Colcar dejaron para otro año la posibilidad del chaqueño de lograr en esta edición del Guaraní la victoria que en el 2014 se le escapó en el final. Aprovechó su infortunio, el local Viktor Rempel, quien navegado por su hijo en la Toyota Hilux, quedó al frente de la clasificación de los autos en esta segunda fecha del Dakar Series. No fue la única satisfacción guaraní porque Beto Ramirez lideró los cuatriciclos 4 x 2 mientras que entre los 4 x 4 no hubo sorpresas: ganó el argentino Daniel Mazzuco.
Por el equipo de VA (Especial desde Villarrica, Paraguay)
Fotos: Mónica Paz
