ADRENALINA, DE LA BUENA.
Franco Colapinto, pateó el tablero. El Alpine por fin se despertó en la clasificación para el Gran Premio de Canadá de Fórmula 1,y le permitió concretar la escalada porqué no, imprescinble, ante el mar de intereses, conjeturas y presiones que conviven con la deportividad y su verdadero espíritu, dicen por ahí, cada vez más con el paso de los años, en retirada.
Por poco no se metió el chico argentino entre los 10 de adelante, en la clasifica que el amonestado Max Verstappen, segundo arriba de su Red Bull, cayó derrotado en la pelea por la pole ante un resuelto George Russell, aprovechando las bondades de un Mercedes que, como en 2024, le permitía disfrutar del inigualable aire puro que depara andar en punta en los pasos previos a la carrera donde, no se pasó por alto que los McLaren no se mostraron dominantes, si bien a milésimas de los que precedieron, como ha sido habitual en lo que transcurre de la temporada. Oscar Piastri, puntero del campeonato tercero y Lando Norris séptimo. Entre ambos, Kimi Antonelli (Mercedes) cuarto, el ferrarista inconcluso aún Lewis Hamilton, quinto (Charles Leclerec, octavo) y sexto el nato batallador Fernando Alonso, sexto en el Aston Martin.
Quedó 12º Franco en la Q2, luego de superar la valla de la Q1, propósito que hasta un par de horas antes en el Circuito Gilles Villeneuve, había poco elementos afuera del box del equipo Alpine como para suponer hasta donde subiría Colapinto. Suposición que algo más atenuada, fue efectuada al hablar de Pierre Gasly, el piloto 1 en las filas de Flavio Briatore.
Impresionante. Colapinto pasa a centìmetros del paredón.Sin embargo, no fue el francés quien se anotó, sino Franco con una posición de largada más oportuna, imposible. Y por esas cuestiones disciplinarias existente en el reglamento de la Fórmula 1, subió dos puestos más en la grilla de partida del GP de Canadá, a iniciarse en punta con dos que si de buena onda se trata, mejor será hablar de otras cosas. Russell poleman y atrás Verstappen sabiendo que un paso en falso más, podía significar anotarse en su libreta de calificaciones, el punto restante para llegar a los 12 que automáticamente lo dejarían sin correr una de las 14 carreras restantes.
Por imperio de las características de la pista diagramada en Montreal, en la Isla de Notre Dame, rápido, con autos separados por contadas milésimas, más curvas, unas lentas donde las falencias del Alpine del argentino más se notaban y además angosto y con paredones como límites amenazantes en tramos a alta velocidad, martirio para los autos celestes y rosados también vinieron flaqueando, a Colapinto su panorama complicado acentuado el viernes, al seguir merodeando por el fondo del pelotón, de repente a poco de afrontar la clasificación, se vislumbró que algo podía cambiar.
En una de las referencias iniciales, apareció tercero a apenas 250/1000 del más rápido en ese pasaje, Verstappen. El tiempo de la Q1, fue consumiéndose; sin embargo el Alpine nº43 resistió y cuando el pibe clavó el séptimo tiempo, en anhelo de pasar a la Q2 ganó fuerza hasta conseguirlo.
Esa Q2 lo encontró en la misma sintonía, peleando por convertirse en uno de los 10 pilotos que pasaban a la Q3 por la pole. No pudo ser, sin embargo, Franco y todos en Alpine se sintieron reconfortados con el 12º tiempo. No esperaron los recargos posteriores: 10 posiciones perdidas por Juki Tsunoda por no respetar una bandera roja, y luego al cada vez más afirmado francés Isack Hadjar, sancionado con tres puestos por obstaculizar con su Racing Bulls, la trayectoria del español Carlos Sainz (los Williams prometieron más de lo que mostraron) durante la primera sesión clasificatoria. De esa forma, Franco quedó 10º en la grilla de partida.
«Si miramos dónde estábamos el viernes y en las carreras anteriores, lo conseguido en clasificación fue un gran resultado; ojalá se pueda mantener «la racha», sostuvo Colapinto, recobrando parte del humor y sonrisas perdidas ante la limitaciones del Alpine que ha jugado en contra desde el punto de vista mental y psicológico.
«En esta clasificación en Montreal, me tiré con todo y me sentí sentí mucho más a gusto con el coche», resaltó de cara a, recién, su cuarto gran premio con el Alpine (penúltimo dado que como sabés, al anunciarse su debut en el equipo, se dijo que iba a participar en cinco fechas del Mundial.
«Fijándonos lo apretada que estuvo la clasificación, teníamos potencial para habernos metido en la Q3», consideró después y antes de ratificar que tocó un muro «en mi último intento para mejorar y perdí algo de tiempo; por eso pedí disculpas al equipo por la radio. Pero bueno, en lineas generales quedé contento con la progresión experimentada».
El GP de Canadá lo esperó «aún buscando mi sitio en el equipo, e intentando entender hacia dónde tenemos que ir con los reglajes», señaló en relación a los «cambios positivos hechos durante la noche, los ingenieros hicieron un gran trabajo y, desde ya deseo que podamos mantener la racha en la carrera, en especial teniendo en cuenta cómo se sentía el coche en las tandas largas del viernes».
Así largaban

Por suerte pareciera que reaccionó justo a tiempo, cuando lo que se venia parecia inevitable. Ahora tiene la oportunidad de consolidarse.
Es algo que incluso la prensa britanica esta observando con atencion:
https://www.the-race.com/formula-1/this-is-colapintos-big-chance-to-secure-his-f1-future/
Saludos.