SOBRE GUSTOS NO HAY NADA ESCRITO

…y sobre conformación de binomios para los 200 Km de Súper TC 2000, tampoco.Por eso hay diversas combinaciones como las hubo para esta edición 2016, que afortunadamente regresó al Gálvez porteño. Algo que en la soleada tarde, Antonio Abrazian, presidente de la categoría, prometió continuar para el futuro.

Canapino estuvo en permanente contacto con Ortelli y escuchó sus comentarios sobre el andar del  Cruze.

 

Esa variedad de combinaciones da para juntar dos jóvenes y ascendentes  pilotos como Javier Merlo y Martín Moggia y gracias a la gran capacidad conductiva de Martin, una de las promesas del automovilismo argentino, continuar la racha exitosa de Fiat en la categoría con el mejor tiempo entre los invitados en el primer ruido oficial en pista de los 200 Km.

“Cuando Javier (por Ciabbatari, el responsable técnico del equipo) me propuso a Moggia como invitado acepté enseguida porque además de ser muy buen piloto, Martín es un pibe tranquilo y humilde” le contó Merlo a Visión con la sonrisa de satisfacción por el acierto de la elección de su invitado. “Fue una buena forma de responder a la confíanza que me tuvieron“ se limitó a decir Moggia, con la felicidad atenuada por el recuerdo de la reciente muerte de su padre, su gran sostén e inseparable compañero en las carreras.

Moggia disfruta de su feliz viernes junto a Javier Ciabattari, el responsable técnico de Fiat que lo propuso como inivtado de Merlo.
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Mezclar juventud y experiencia es otra buena alternativa. Y si además son dos campeones de TC y referentes de una marca, como Chevrolet, mucho mejor. Y mucho  mejor si hay una historia especial entre el joven titular Agustín Canapino (26 años) y un jerarquizado y experimentado (43 años)  invitado como Guillermo Ortelli.

De casualidad no lo tuve entre mis brazos” reconoció el Guille con el recuerdo de aquellos años, (1997 y 1998) cuando tenía la asistencia técnica de Alberto Canapino y Agustín era aun chiquilín de ocho años que revoloteaba por boxes averiguando y mirando todo. “Me la pasaba jugando a la play con Guillermo…” rememoró a su turno Canapino antes de develar que la elección de Ortelli ya la tenía decidida desde febrero cuando se supo que se correrían los 200 Km. “Guillermo siempre fue mi gran ídolo y correr juntos es cumplir un sueño. Voy a disfrutarlo y aprender mucho de quien es la figura. Por eso creo que en este binomio soy más invitado que titular…” agregó el Titán sobre esta especial relación.

El Súper TC 2000 encabezó la grilla de los autos de todas las categorias participantes formados en la recta principal del Gálvez.

 

“Pucha, cómo pasó el tiempo…” se sorprendió Ortelli ante Visión, recordando que aquel chiquilín que lo admiraba y lo veía casi inalcanzable  es actualmente uno de los mejores pilotos de Argentina y le confió su Chevrolet Cruze para este fugaz retorno al Súper TC 2000. “Es un tranquilidad tener a alguien de la capacidad y experiencia de Guillermo manejando mi auto y lo demostró enseguida (fue el más veloz en el primer entrenamiento) adaptándose a un circuito técnico y difícil” destacó Agustín, quien sin dejar de lado su admiración por Ortelli admitió que “cuando corremos por separado, Ortelli  es un rival más al que le quiero ganar…”

Imaginense que van peleando el primer puesto en la última vuelta de Rafaela en la carrera del Millón de pesos del próximo 14 de agosto. ¿Qué hacen? les preguntó Visión

¿Qué hacemos , Guille?” ´planteó Agustín

“Y, arreglamos y nos repartimos el premio, je..” respondió Ortelli  con la risa complice de Agustín

Qué historia pasada, presente y futura  la de este jerarquizado binomio que presenta Chevrolet en los 200 Km de Buenos Aires.

 

Por Miguel Sebastián

Fotos: Mónica Paz

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