UNA JOYITA CON HISTORIA

Esta es la definición que le cae justa a  la cupecita Chevrolet modelo 1939 que Tadeo Taddía paseó orgullo por la reciente 14ª edición del Gran Premio Histórico organizada por el Automóvil Club Argentino.

El nieto de Tadeo Taddía, en el habitáculo de la legendaria cupecita..

 

Tadeo es nieto de su homónimo tío, un entusiasta piloto que corrió en el TC de los años 30,40,50 y hasta mediados de los 60 en una extensa campaña que lo vio competir junto a destacadas figuras de la categoría de las distintas épocas. Sin muchos pergaminos en su campaña, tuvo  el privilegio de ser el piloto de Chevrolet mejor ubicado () en el Gran Premio que en agosto de 1937 inauguró la historia del TC

Esta cupecita se destacó entre las  once  participantes en la categoría TC B por ser la única que es original. Por lo tanto tiene su buena historia.  Es la misma que el abuelo Taddía condujo en la legendaria Buenos Aires-Caracas de 1948. Dio la vuelta y terminó en un meritorio 10º lugar gracias a su reconocida regularidad  También completó el regreso de Lima a Buenos Aires , esa vez en el 15º puesto. Luego siguió corriendo en las carreras de TC y los Grandes Premios.

Los pintorescos escenarios que transitó el Gran Premio Histórico vieron el orgulloso paso de la cupecita de Tadeo Taddía.

 

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Nada que ver con dedicarme al automovilismo, corrí un poco en karting pero dejé por pedido de mi madre, que ya había sufrido bastante con las carreras con mi abuelo…” le contó a Visión un amable Taddía, dueño de una agencia de autos en Almagro, el barrio porteño donde vivió su abuelo. “El auto lo tengo en la agencia y lo disfruto  con sacarlo una vez al año, para participar en el Gran Premio Histórico y mostrarlo por los distintos lugares por donde pasa” agregó.

No cualquiera puede darse el gusto de pasear con un auto del abuelo que tenga tanta historia.

 

Por el equipo de VA

Fotos: Mónica Paz.

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