CUESTIÓN DE ORGULLO

Quien conoce a Agustín Canapino sabía que no iba a conformarse sólo con la anticipada conquista del título del Súper TC 2000. Su alto espíritu competitivo y orgullo pedía más, quería más, necesitaba más. Y más si como rival de la última fecha en el Oscar Cabalén estaba Leonel Pernía, otro de los tantos pilotos con los que más allá de saludos formales, mantiene una tensa relación. Y más desde el punto de vista de la marca, si en el box como invitados especiales estaban París Fawlou y Carlos Zarlenga, los presidentes de General Motors en Argentina y Brasil.

El Fiat de Carlos Merlo asoma expectante ante el duelo Canapino-Pernía. El piloto de San Luis cerró la temporada como la había iniciado: con un valioso tercer puesto.

 

Ganó Agustín de punta a punta como para no dejarle ni siquiera una miga a sus rivales,  del cierre del quinto campeonato de Súper TC 2000 presenciado por mucho público. que reiteró el poder de convocatoria de la categoría en el Cabalén. Y le ganó en el mano a mano a Pernía, que recién cobró cierta temperatura  cuando en la parte final, y tras superar a su compañero Christian Ledesma, el Tanito se le fue encima del Chevrolet. También lo suyo era una cuestión de orgullo. Ganar la carrera y ante el campeón y gran rival, hubiese significado un consuelo al fracaso que fue la pérdida de un campeonato, que desde el arranque tuvo a Renault como uno de sus principales candidatos por su  poderío estructural  y económico.

La imagen final e ideal de la temporada fue la llegada triunfal del campeón Agustín Canapino.

No puedo ser tampoco la carrera. “Nos faltó inteligencia para ganarle a Canapino. Agarré el aceite y por eso me pasó Ledesma. Luego cuando pregunté si me podía ceder el segundo lugar porque mi auto venia mejor, me dijeron que no había órdenes. Por eso para pasarlo tuve que desgastar el aut,o y así cuando llegué detrás de Agustín no tenía con qué pasarlo. Iba muy rápido en la recta y se defendía bien en los mixtos, donde mi Renault andaba mejor…” , lamentó ante Visión un resignado  Pernía. Sin embargo, no atribuyó a la falta de inteligencia del equipo que Renault llegase a la fecha final sin chances de lograr un título de pilotos, para los que eran candidatos firmes. “Tuvimos un año irregular. Tal vez faltó enfocarnos más en el certamen de pilotos, como se hizo en el de Equipos y Marcas, que se ganó…”, fue la tibia autocrítica de Leonel. En 2017  tendrá revancha, ya que es uno de los pilotos confirmados en el equipo (los otros son Facundo Ardusso, Emiliano Spataro, Germán Sirvent e Ignacio Julián) para la próxima temporada. El que falta saldrá entre Josito Di Palma, Ricardo Risatti y Julián Santero.

 

Carlos Zarlenga y París Pawlou, presidentes de Chevrolet en Brasil y Argentina, compartieron el festejo con Canapino.
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“Sabía que el rival iba a ser Leo y por eso fue importante largar adelante en un circuito difícil para los sobrepasos», reconoció Canapino, tan feliz y tranquilo como el sábado de su coronación, luego de la victoria que por si fuese poco con lo cosechado este fin de semana en el Cabalén, lo convirtió con cuatro triunfos en el más ganador del año. Como corresponde a un gran campeón.

Todas fueron éxitos clave. Las tres consecutivas en los 200 Kms de Buenos Aires y las dos carreras en el callejero de Santa Fé, le permitieron marcar una buena diferencia al frente del campeonato. La final en el Cabalén le sirvió para rematar la impecable faena, que tuvo como respaldo el gran rendimiento en velocidad y confiablidad del Chevrolet  Cruze, y el equipo técnico encabezado por Luciano Monti. El mismo que a mediados del año pasado empezó a  construir este campeonato al convocar a Canapino para su retorno  a Chevrolet. Agustín lo recordó en la conferencia de prensa tras contar detalles de su victoria número 12 en la categoría.

“Por encima de las estadísticas lo importante es ver feliz a mi familia, amigos y todo el equipo…” , reiteró Canaa en medio de felicitaciones y abrazos. El domingo, en el TC de La Plata, va  a la búsqueda de aumentar esos números. Aunque a diferencia del fin de semana cordobés,  sus chances caminan por la vereda del milagro.

“Recién el jueves voy a pensar en el TC, por ahora quiero disfrutar este momento”,  proclamó Agustín.

Lo bien que hará.

 

Por Miguel Sebastián (especial desde Alta Gracia, Córdoba)

Fotos: AIF y Prensa Súper TC 2000

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8 COMENTARIOS

  1. No me simpatiza Canapino, pero felicitaciones, por lo menos no ganó el llorón de Rossi, esperemos que en TC lo dejen de Garcés también al lloron

    • Si Rossi es llorón que queda para Canapino entonces, que es un nene caprichoso. Hay audios desde su auto que parece un nenito histerico haciendo pataleta porque no le compraron un chupetin.

      • Si a vos juzgas a un piloto por como grita por radio, me parece que no entendes nada de Automovilismo. Agustin Canapino es gigante!!.
        Gano en todo lo que se subio, y le da categoria a los equipos que lo contratan.
        Que seria de Chevrolet este año, sin Agustin??? Estarian como tercer o cuarto equipo, detras de Renault, Toyota y Fiat.
        Como le fue a Peugeot sin Agustin?… Te guste o no, es un PILOTAZO!!

        • No juzgo como grita por radio, sino lo que grita.
          Vos deci lo que quieras, para mi no deja de ser un nene caprichoso.

        • la pregunta justa sería ¿ como le fué a PEUGEOT sin GIROLAMI? porque te recuerdo que LE PINTÓ LA CARA a canapino 2 veces seguidas…

  2. Nunca comprendí ni acepté el termino «pecho frio»….pero observando a Pernia estos últimos años lo comprendí.

  3. Canapino un gran piloto. Debería estudiar ingles, porque si en un par de años nace una supercategoría Turismo como parece con la fusión del DTM, etc sería el indicado parar ir.-

  4. Y daaaale con pernia!!!…en ésta, inteligencia te faltó??…y huevos cuanto te ganaron pechito López y fontanita……amaaaaargo….

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