MENOS MAL QUE LO TENÍA PESADO…

Con 80 kilos de lastre -50 más que el siguiente más pesado-, Manuel Luque volvió a darle una paliza a todos sus rivales con el Fluence del Ambrogio Racing y sacó una diferencia lapidaria cuando apenas se llevan corridas 5 fechas del TC 2000. ¿Alguien podrá pararlo?

El santefesino puso los puntos desde el arranque en Río Cuarto, quedándose con la pole y con un 8° puesto en el clásico Sprint de los sábados, en el que José Manuel Sapag, con un Civic, se llevó el triunfo. Y, en la cerrera principal, lideró de punta a punta sosteniendo un interesante duelo con quien también había llegado como su escolta en el campeonato, Marcelo Ciarrocchi, con el Linea del PSG16.

Manu se bancó los ataques de Ciarrocchi y se logró su segundo éxito al hilo.

 

Y todo le salió tan redondo a Manu que, a poco para el final, Ciarrocchi lo tocó a Mariano Pernía, compañero de equipo del ganador, y lo dejó fuera de carrera, por lo que luego fue excluido de la final. Así, Federico Iribarne, con un Civic, heredó el 2° puesto, mientras que Tomás Gagliardi Genné, con un Focus del Fela, completó el podio y es el nuevo escolta en el campeonato.

“Es increíble la racha que estamos teniendo, estoy feliz con este presente. Lo del Ambrogio Racing es impresionante, todo esto es mérito de ellos. Esta fue la carrera más difícil en las que me tocó ganar en el año. Después de un toque con Marcelo (Ciarrocchi) el auto no fue el mismo, quedó un poco dañado, pero por suerte lo pudimos sacar adelante”, contó Luque.

Luque, otra vez en lo más alto. A su lado Ciarrocchi, luego excluido, e Iribarne.

 

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Con esta tercera victoria de la temporada, Manu manda en el campeonato con 199 puntos. Lejos aparece Gagliardi Genné con 122, Ciarrocchi 119, Iribarne 118, Pernía 106 y Franco Crivelli 105,50. La próxima, el 16 de julio en el Gálvez.

 

 

Por Cristian Re.

Fotos: prensa TC 2000.

 

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